Fortinazo

Con un Franco Miserda inspirado, El Fortín desbordó de alegría al vencer 2 a 1 a Compañía. La emoción  para Navarrine y sus dirigidos no solo tiene que ver con los tres puntos sino, de la manera inobjetable con que lograron aplacar a su rival. El Fortín arrancó la temporada con un tremendo triunfo como local y sin dudas que significa mucho más que tres punto para todo el Aurinegro.

Comenzó el campeonato local. Arrancó la hora de la verdad. Llegó el momento de la competencia oficial. Haciendo de local en el Estadio Esteban Chiari y en lo que ha significado su mayor alegría desde el regreso a la Liga de nuestro medio, El Fortín se permitió una inmensa satisfacción al superar a Compañía por 2 a 1.

Resultó poco menos que imposible poder describir tanta felicidad en un vestuario. El Aurinegro reunió argumentos, fue efectivo y contundente, obligó a Compañía a no poder absorber su propia confusión y tras el pitazo final de Bono, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes, desataron la locura generalizada.

Con un clima ideal, ambos equipos afrontaron el debut con reales expectativas. El Fortín, quien hizo las veces de local en canchas de Sports, un conjunto que se preparó con una base de pretemporada para superar lo hecho el año pasado, y Compañía poniendo a rodar la era Santana con la firme convicción de dejar atrás una larga sequía sin títulos.

El Verde con un dibujo táctico ambicioso (3-4-3), buscó tener la iniciativa, pero la respuesta no se hizo esperar por parte de El Fortín y el partido se fue armando. A los 11’, tras un rechazo defectuoso, toda la última línea del Aurinegro asistió sin poder reaccionar y Martín Salinas, con excelente definición, colocó la redonda por sobre la humanidad de Vergé decretando el 1-0. Sorpresivo hasta ese momento el marcador abierto, pero que le permitió al once visitante tener el control del partido por algunos minutos inclusive, con un buen remate de Baque que el arquero, ex Sports, resolvió de manera efectiva.

El Fortín asumió estar en desventaja y merced a quienes terminaron siendo vitales en el triunfo Martínez y Miserda, la igualdad se concretó. Con 21’ de juego tras un rebote, quien salió beneficiado fue Miserda que bien habilitado y con una defensa que durmió en los laureles, tuvo tiempo para recibir el balón, acomodarse para su mejor perfil y con remate cruzado dejó sin chances a Ripoll.

El encuentro se hizo de ida y vuelta con Martínez, misionero de origen, mostrando velocidad y buena técnica individual para convertirse en toda una pesadilla para una defensa que lo sufrió y mucho, mientras que Colombini en la única maniobra que pudo sacarse la marca de encima, quedó de frente al arco y sacó un violento remate que Vergé, con mucho esfuerzo, logró contener.

En los minutos finales, Candia buscó sorprender con un tiro libre que se perdió apenas desviado y tras un centro medido de Gregorio Salinas al corazón del área, llegó el cabezazo de Martín Salinas que se perdió apenas por encima del travesaño.

En la segunda mitad, Compañía no fue ni una cosa ni la otra. Intentó tener la pelota y ejercer supremacía, pero los volantes encargados de la creación brillaron por su ausencia. Ofensivamente no creo ninguna ocasión desde el juego mismo, más allá de los cambios que introdujo el entrenador y terminó siendo un equipo largo que ante cada contra que propuso su oponente, mostró enormes falencias.

Navarrine definió y a puro reflejo, Ripoll desvió la redonda por sobre el horizontal y de una contra bien armada por el mismo Nicolás Navarrine, nació la habilitación para Miserda y el remate del número nueve se perdió desviado. A falta de recursos en el armado y la escasa tenencia, Compañía intentó con la pelota parada y Mateos tuvo una clara chance, pero no encontró la justeza necesaria.

Desde cubrir bien los espacios, mostrar supremacía en la zona media y tener ambición por quedarse con los tres puntos, el Aurinegro fue por más y lo logró. Nuevamente a los 21’, Martínez se llevó puesto a su marcador, llegó al fondo, mandó el centro y el oportunismo de Miserda, terminó con el balón en el fondo de la red.

El Verde sintió estar en desventaja y no tuvo respuestas individuales, ni colectivas para trastocar el destino del desarrollo. Solamente Colombini, con todo su amor propio, quiso superar la resistencia de Vergé con un tiro libre que el arquero resolvió con una gran atajada y posteriormente, entrando por el segundo palo, cabeceó desviado.

En El Fortín todavía se pellizcan y no pueden creer lo que consiguieron. Claro que de ahora en adelante habrá que poner acento en sí se puede aprovechar esta notable victoria para consolidar un camino triunfal. Por su parte, en Compañía, Santana tiene por delante mucho trabajo para buscar en primera medida un equilibrio y llevar adelante su idea de pensar en el arco de enfrente sin quedar tan expuesto de mitad de cancha hacía atrás. Está claro que el arranque estuvo muy lejos de lo imaginado y la segunda fecha lo obliga a empezar a sumar.

El Fortín 2
Federico Vergé
Denis Aguilar – Manuel Capaldi – Guillermo Araujo – Julián Zapata
Ignacio Velázquez – Gastón Quiroz – Gonzalo Bernárdez
Nicolás Navarrine
Darío Martínez – Franco Miserda
DT: Carlos Navarrine.

Compañía 1
José Luis Ripoll
Nicolás Mateos – Mariano Sumich – Santiago Aciarri
Juan Cuello – Alejandro Baque – Leandro Candia – Nicolás Páez
Gregorio Salinas – Nicolás Colombini – Martín Salinas
DT: Alejandro Santana.

Cambios en El Fortín
Marcelo Quiroz x Guillermo Araujo.
Brian Simaldone x Nicolás Navarrine.
Julio Bartolino x Franco Miserda.

Cambios en Compañía
José Luis Valenzuela x Santiago Aciarri.
Carlos Monacci x Gregorio Salinas.
Diego Roldán x Nicolás Páez.

Suplentes en El Fortín: Luciano Zapata y Federico Acevedo.
Suplentes en Compañía: Francisco Balbiano y Gonzalo Polanco.

Goles
11’ PT Martín Salinas (Compañía)
21’ PT Franco Miserda (El Fortín)
21’ ST Franco Miserda (El Fortín)

Juez: Oscar Bono.
Asistentes: Rodrigo Felioga y Luis Martínez.

Sub 23: El Fortín 4-1 Compañía